Historia

En el 1930 Giuseppe Moirano, el fundador de la homónima guarnicionería Moirano, inicia a trabajar como aprendiz para un guarnicionero local y luego de haber aprendido las técnicas necesarias para crear guarniciones de calidad elevada, decide de abrir la guarnicionería en su pueblo. Para Giuseppe era mas que un trabajo, era una pasión que lo incitaba siempre a mejorar. Además de realizar guarniciones adecuadas para todos los usos y ocasiones (incluso el histórico Carnaval de Ivrea), aprende a restaurar carruajes para las nobles familias usando tejidos con diseños de época llevandolas a su esplendor original.
En los años '60 cuando el avance tecnológico requería nuevos estilos de vida; y la mayor parte de guarnicioneros eran obligados a cerrar sus negocios, los dos hijos de Giuseppe, primero Felice y despues de algunos años Giacomo, se unieron al padre para llevar adelante la tradición de la familia, concientes, de ser artesanos ligados al pasado, pero que propio por su capacidad de hacer productos a mano de calidad superior los habría llevado incluso al futuro...y tuvierón èxito.
Cuando Giuseppe se retiró del trabajo estaba orgulloso de saber que sus hijos habrían continuado con el arte al cual se dedico con responsabilidad y amor, y hoy Davide, el hijo de Giacomo, ha iniciado a aprender las técnicas de trabajo. Felice e Giacomo se dividieron el trabajo: Felice se dedica a la investigación histórica de las guarniciones, proyecta los diseños que serán utilizados para guarniciones generalmente para presentaciones, competiciones y concursos tradicionales, proyecta también guarniciones basándose sobre pedidos del cliente, asegurando así el equilibrio adecuado de los elementos para el caballo y el conductor.
Giacomo en cambio se ocupa de la fabricación de collares rellenos con paja de centeno, revestidos de cuero fino italiano (como había aprendido de su papá) y tiene mucha atención en el acabado de las hebillas confeccionadas en diferentes estilos utilizando diferentes metales ( incluso en plata maciza) siguiendo técnicas del pasado.
Ambos hermanos, posteriormente controlan el acabado final del producto (que cosido a mano nunca es igual a otro producto ya realizado), para garantizar guarniciones de alta calidad y de larga duración.
Actualmente muchos coleccionistas poseen todavía guarniciones de Giuseppe Moirano en perfectas condiciones.
Durante mucho tiempo los Hermanos Moirano han trabajado para el mercado italiano, pero después de haber participado en la feria de Verona en 1982, la calidad del trabajo de la guarnicionería Moirano ha pasado las fronteras de los mercados internacionales.
En el año 1997 estuvieron presentes en los campeonatos del mundo en Alemania como expositores, obteniendo un gran exito, así como el año sucesivo en Roma.
En el año 2000 fueron llamados a trabajar en los Estados Unidos para una famosa coleccionista, la cual introdujo el nombre Moirano en el mercado americano; estimulándolos a participar en el año 2002 en la conferencia de Hot Springs en Virginia (USA).
Actualmente las guarniciones Moirano están en exhibición en Harrod's (Londres), donde sólo los productos de más alta calidad y prestigio encuentran acogida.
La marca Moirano es siempre una garantía de calidad y excelencia, es por esto; que las guarniciones son conocidas y apreciadas por conocedores en todo el mundo.

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El histórico carnaval de Ivrea

El histórico Carnaval de Ivrea es un evento único en el mundo, es una fiesta que recuerda el período en el cual la ciudad (que está a pocos kilómetros de nuestra guarnicionería) estuvo durante el período Medieval bajo el poder de un potente feudatario y que, como dice la historia, fue asesinado por la hija del molinero -la heroína del Carnaval- desatando la rebelión popular.
Estos hechos se recuerdan con la famosa "batalla de las naranjas", que simboliza la rebelión del pueblo (naranjeros que lanzan a pie) contra la tiranía (naranjeros que lanzan desde el coche). Muchos son los personajes del Carnaval, pero un papel muy importante es hecho por los caballos que acompañan los personajes durante todo el evento, y de los caballos que tiran los coches (de donde se lanzan las naranjas) por el camino de la batalla.
El Carnaval es una fiesta en la cual participa toda la población urbana y adyacentes, durante el evento los dueños de los caballos compiten por ser los más elegantes tanto en la elección de los caballos, como en el enganche; y por consiguiente, en las guarniciones puestas en el caballo.
Quién decide de hacer participar sus caballos al Carnaval se prepara varios meses antes, debido a que durante los tres días del evento, los caballos tendrán que estar al máximo de su forma física.
Todos los participantes se exhiben con enganches que preveen el uso de collarones de tipo Inglés.
Para quien fuera un verdadero apasionado de caballos y de enganches, es de señalar que cada año el número y la calidad de los enganches está en constante aumento; de hecho hablamos de al menos 50 enganches entre troncos (dos caballos) y cuartas (cuatro caballos). Un jurado compuesto de expertos nazionales y extranjeros escogerá el mejor enganche teniendo cuenta además de la belleza de los caballos y de las guarniciones, también del estilo de conducción y de la capacidad del conductor.
Las guarniciones llevan las tradicionales plumas de avestruz que serán ubicadas encima del sillín y de la cabezada, y vienen escogidas en base al color del equipo. Otro elemento de decoración son los cascabeles, que indican la inminente llegada de los caballos entre la multitud.
Las guarniciones Moirano realizados para el Carnaval están diseñados específicamente para este evento, y se inspiran al estilo del siglo XIX, un estilo refinado y elegante, muy apreciado en la zona, presentan un gran número de decoraciones pero al mismo tiempo son seguros y resistentes porque tienen que cargar con el peso del coche y la fatiga que se presenta durante la batalla.
Los coches presentes lucen principalmente guarniciones en cuero y barniz negra, pero según recientes solicitudes, también guarniciones en color tabaco. Las hebillas actualmente más utilizadas son redondas, planas u ovales, casi siempre cromadas.
Actualmente tenemos diferentes tipos de cascabeles tanto en estilo cómo en colores, y diferentes modelos con respecto a los cascabeles del sillín.
Al final del Carnaval los troncos y las cuartas más bellas vienen premiadas, y es para nosotros una gran satisfacción saber que nuestro trabajo viene apreciado por parte de un jurado calificado.
Nuestra historia por lo tanto, comienza desde aquí, una zona en la cual la pasión y la tradición del caballo son muy arraigadas.

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